CUERPOS EMPODERADOS
Sobre el proyecto
Cuerpos empoderados es a su vez una colectiva y un proyecto de investigación-acción sobre el cuerpo, la gordofobia y las diferentes opresiones corporales desde una perspectiva crítica. Pero también es una apuesta personal de todas las integrantes por pensarnos y entendernos lo más libremente posible, y sobre todo por compartir nuestro proceso.
La colectiva surge en 2014 a raíz de un proyecto de aproximación a la investigación social iniciado por un grupo de futuras antropólogas.
Lo que comenzó siendo una intuición, una necesidad de entender una realidad que durante años habíamos vivido en silencio y de forma individual, se convirtió en un grupo de estudio, de pensamiento y reflexión sobre la gordura, la vivencia del cuerpo gordo y la violencia que acompaña al día a día de las personas gordas. Comenzamos haciendo entrevistas a gente gorda, realizando encuestas sobre la relación de las mujeres con su cuerpo y leyendo mucho sobre feminismo, estudios corporales y formas de opresión. Así nos dimos cuenta de que los años de dolor, de culpa, de sentir que algo estábamos haciendo mal solo por el hecho de estar gordas eran compartidos con muchas otras personas y no se explicaban con el argumento siempre recurrente de la falta de voluntad.
Descubrimos que en nuestra sociedad hay miles de maneras de controlar nuestros cuerpos y que la exaltación de la delgadez y el rechazo a la gordura es una de las herramientas más potentes a través de las cuales se dicta como deben ser los cuerpos.
Gordofobia y cultura de la delgadez son dos caras de una misma moneda que esconde una forma de opresión tan compleja que hasta nosotras mismas nos habíamos creído el discurso y éramos las primeras en cargar con todo el peso de poseer un cuerpo impropio, un cuerpo que no era digno de ser mostrado.
Descubrir que la gordofobia era real y llamarla por su nombre, poder decir abiertamente que se trataba de una forma de opresión fue el primer paso para poder mirar a nuestros cuerpos de manera diferente.
Este descubrimiento fue tan importante para nosotras que nos alteró, transformó y nos descubrió un mundo repleto de posibilidades en el que por primera vez éramos las protagonistas, había llegado el momento de estar, de disfrutar, de mirarse y de dejar de vivir a pesar de nuestro cuerpo.
En todo este viaje hubo un punto crucial en el que empezamos a perfilarnos como lo que ahora somos: la enorme respuesta que tuvo nuestra propuesta. Lo que empezó siendo una inquietud personal se convirtió en un problema real que nos afecta a muchas. Con cada entrevista, con cada respuesta, contactábamos con el sufrimiento que acompaña a las personas gordas. La gordura era una experiencia compartida pero también silenciada, un sufrimiento ignorado y asumido como eterno acompañante. Ser conscientes de tanto dolor y de su dimensión social y política nos llevó inevitablemente a la denuncia y acogida (dentro de nuestras posibilidades) de la realidad que se esconde detrás de la gordofobia.
Nuestros objetivos
Nuestro trabajo parte de los feminismos como principal eje ideológico, ético y político
Con nuestro trabajo queremos incorporar la belleza canónica delgada como forma corporal impuesta, y en consecuencia, como instrumento disciplinario del cuerpo. Desde la consciencia de la opresión del poder, nos descubrimos a nosotras mismas como parte del lado oprimido, pero también como reproductoras de actitudes dominantes y excluyentes. Por eso necesitamos hablar y explorar la experiencia de todas las que tenemos cuerpos que desbordan la norma.
Dentro de nuestros objetivos se encuentran la visibilización, la difusión y la creación de lazos con otros grupos sociales, apostando por un discurso crítico y de denuncia social.
Estamos cansadas del silencio y la pasividad que hay ante un problema real que nos afecta a muchas.
En paralelo pretendemos generar espacios físicos y concretos donde pensar juntas sobre nuestras experiencias corporales, crear y proponer herramientas de lucha por la liberación corporal y generar espacios de seguridad donde sanar heridas, crecer, sentirnos fuertes y preparadas para combatir la violencia a la que se expone nuestro cuerpo en las calles y en nuestros hogares.
Empezamos este proyecto con la intención de comprender, de encontrar y crear herramientas que nos sirvan a todos esos cuerpos que no tenemos lugar ni físico, ni mental en esta sociedad. Para encontrarlo y situarnos con dignidad, ya que entendemos el trabajo social como una plataforma para el cambio y la extracción de potencialidades positivas.
Vivimos en una realidad donde el poder nos atraviesa. Las referencias culturales a las que estamos expuestas tienen siempre un punto de partida: el hombre occidental, blanco, heterosexual, cisgénero, propietario, de clase media-alta. Y es a partir de esta imagen que se crean los diferentes mundos que componen nuestro imaginario, mundos que la mayoría (quienes no encajamos en esa definición) sufrimos.
La Colectiva fuimos
Laura Fernández
Lara Gil
Cristina Castro
Aparición en Medios
Hysteria Magazine
Episodio radiofónico #87 Cuerpos empoderados
Cabezas de tormenta
‘Gordofobia’: la violencia silenciosa que hay detrás de la cultura de la delgadez
Publico.es
Gordofobia, una discriminación socialmente aceptada
Etic
Activismo gordo: hacia una gordura orgullosa
Yorokobu
Presentación del colectivo
Femiagenda